Planes (Alicante), arciprestazgo de la Mare de Déu del Miracle, diócesis de Valencia
Según la documentación de la Causa general (legajo 1395, expediente 47, 16 folios, asesinaron allí a dos sacerdotes; nadie fue fusilado por los nacionales y muchos de los supuestos autores tuvieron penas atenuadas o libertad condicional. Allí está enterrada la beata María Luisa Montesinos Orduña, cuyo asesinato y el de sus familiares se relata en el comienzo de la documentación, en el Estado 1 (folio 2), firmado el 4 de noviembre de 1940 por el alcalde Álvaro Ivars y el secretario del ayuntamiento: "Aunque no proceda consignar en ninguno de estos tres impresos; por tratarse de un asesinato tan grande se hace constar: Que era familia distinguidísima y procedente de esta localidad, conocida por los Montesinos, la cual se componía de padre viudo, de unos 70 años de edad, llamado D. Rafael Montesinos Orduña, cuatro hijos llamados Dª Isabel, Severino, Luisa y Antonio Montesinos Orduña, solteros y mayores de edad, y una anciana hermana política del padre llamada Dª Concepción Orduña Abargues, soltera, de unos 73 años de edad. El padre creo era Interventor de Ferrocarriles, los dos hijos Empleado de Aduanas y Farmacéutico respectivamente, las dos hijas y la tía, si no todas alguna pertenecía a la Juventud de Acción Católica. Esta familia a pesar de su buena posición, cargos que ostentaban, no se les conocía nada de orgullo, simpatizantes a más no poder, lo mismo alternaban con pobres que ricos, grandes que pequeños, jóvenes que ancianos, y en cuanto a cristianos y caritativos no se les podía desear más, y la noche del 4 de enero de 1937, fue asesinada toda la familia en la población de Picasent (Valencia) enterrándoles en este cementerio. Se hicieron los trámites necesarios, en virtud de las disposiciones dictadas, para trasladarles a esta, como oriundos que eran, y a últimos del pasado año 1939, los llevaron a todos, y descansan sus restos mortales en el cementerio de esta villa (Q.G.D.). Esta familia siempre ha residido en esta y algunas temporadas las pasaban en Valencia, pero hace algunos años se trasladaron a Valencia y etnonces venían todos los años a pasar por aquí alguna temporada."
En cuanto a las circunstancias del asesinato, cabe notar en la documentación de Picassent (legajo 1385, expediente 8, 181 folios) que se pide que declare una sirvienta que tuvieron en Valencia llamada Rosa (folio 61) y que la familiar María Cabrera Abargues declara (folio 66): "Que según referencias recibidas, los elementos de la F.A.I. del Grao de Valencia se llevaron de su domicilio, calle del Poeta Quintana nº 1, el día 28 de enero de 1937 a los Sres D. Rafael, Severino y Antonio Montesinos Orduña, y a las Seras Dª Isabel y Luisa Montesinos Orduña y a Dª Concepción Orduña y Abargues, y sus cadáveres fueron encontrados en el término municipal de Picasent donde fueron enterrados, y trasladados después de la liberación a Planes. Ignora quiénes fueron los autores de los asesinatos y demás circunstancias concurrentes (...). Con el fin de poder ayudar a la Justicia me permito indicar sea interrogada la fiel muchacha, llamada Rosa, de Planes (ignoro los apellidos), que en aquella fecha prestaba sus servicios en casa de los Señores Montesinos, ya que esta sirvienta por su bondad y ser muy adicta a la Causa Nacional, revelará cuantos detalles sepa relacionados con el hecho; pues la referida sirvienta no ha sido nunca interrogada, demostrando esta siempre muchos deseos de hacerlo para que se haga la justicia que corresponda". Finalmente, Rosa Cervelló Fenollar declara (folios 70-71) que "se presentaron en la casa de los señores asesinados cinco individuos con pistolas que llevaban las insignias de la F.A.I. preguntando por la señorita Isabel", que no estaban ni esta ni el farmacéutico, pero sí el resto y "una religiosa que era familia de los mismos", que a ella le ofrecieron irse a vivir con ellos a El Grao si no tenía familia en Valencia; que se los llevaron y al día siguiente volvieron y que el día anterior le pidieron que contara el dinero (véase la confusión del relato): "registraron la casa y se llevaron a toda la familia esa misma noche, volviendo al día siguiente a las diez de su mañana, llevándose todas cuantas cosas había en la casa, dinero, invitando a la declarante a contarlo y negándose esta manifestando que no sabía contar tanto dinero, esto fue aún a presencia de los señores. Que no conoce a los autores de estos hechos". Aparentemente, los asesinos tampoco debían saber contar.
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